Descubre Los Primeros Conventos Coloniales en Tunja: Historia Viva y Misterios Ocultos

Oye, ¿alguna vez te has preguntado qué secretos esconden los primeros conventos coloniales de Tunja? Sí, la Tunja de Boyacá, esa ciudad que igual pasa desapercibida para muchos, pero que tiene una historia tan rica que te dejaría con la boca abierta. Vamos a darle un vistazo, porque esto no es cualquier cosa. Aquí hemos tenido de todo: mitos, historias, tesoros escondidos. ¡Pura vida ahí!

Lo que pasa es que Tunja tiene pedigree colonial

Bueno, para empezar, hablamos de una de las ciudades más antiguas de Colombia, fundada en 1539. Sí, hace un buen rato. La ciudad, desde sus inicios, se llenó de iglesias y conventos. Y no, no estamos hablando de esas construcciones insulsas. Aquí hay historia viva, casi puedes sentir los rezos y cantos en los muros, si pones atención.

El Convento de San Agustín: ¿Un mini Vaticano en Tunja?

Este convento es uno de los más antiguos y, claro, tiene su buena parte de historias curiosas. Lo fundaron los agustinos en 1574. Lo interesante aquí es que no se limitaron a hacer un lugar solo para rezar. ¡La biblioteca que tenían era cosa seria! Se dice que llegó a contener algunos de los libros más raros y valiosos de la época. Vamos, que si eres un ratón de biblioteca, este lugar sería tu Disneylandia.

Misterios y pintura en el Convento de Santo Domingo

Ahora, no podemos pasar por alto el Convento de Santo Domingo. Fundado en 1560, este lugar es famoso por sus misteriosas pinturas murales. Y cuando digo «misteriosas» no exagero. Se habla de símbolos ocultos, mensajes secretos en los frescos, todo el paquete. ¿Será cierto? No sé, pero mirando las pinturas, es fácil dejarse llevar por la imaginación.

Los Tesores Ocultos de Las Monjas

Luego está el Convento de Santa Clara la Real, que fue fundado por las monjas clarisas en 1571. Este convento no se queda atrás en cuanto a historia controversial. Se dice que escondieron tesoros en sus paredes, que las monjas eran las únicas que sabían dónde estaba todo oculto. Imagínate ser uno de esos exploradores urbanos que encuentran un cofre lleno de oro en pleno siglo XXI. ¡Vaya locura!

El claustro de los «Saberes Prohibidos»

No me malinterpretes, pero si hablamos de claustros, hay un rumor jugoso sobre el Convento de San Francisco. Fundado en 1550, aunque sí, parece demasiado bueno para ser cierto, se dice que los frailes franciscanos almacenaban ahí ciertos «saberes prohibidos». Estamos hablando de manuscritos que, supuestamente, fueron vetados por la Inquisición. Bueno, si no tuvieran esas cosas, algo nos perderíamos, ¿no?

Entonces, ¿vale la pena una visita a estos conventos?

Vamos al grano. Estos conventos no son solo piedras viejas y polvo. Son lugares que te transportan en el tiempo, llenos de historias, misterios y, quién sabe, tal vez algunos fantasmas si eres de esos que les gusta espantar. Tunja tiene esta vibra única que solo las ciudades con peso histórico pueden ofrecer.

• San Agustín: biblioteca increíble. Para los amantes de los libros antiguos.
• Santo Domingo: pinturas murales con historias ocultas. Perfecto para los curiosos del arte.
• Santa Clara la Real: historias de tesoros escondidos. Querrás sacar tu detector de metales.
• San Francisco: rumores de saberes prohibidos. Intriga y misterio.

Así que si te animas a visitarlos, hazlo con los ojos y la mente bien abiertos. Cada ladrillo tiene una historia que contar y, francamente, esas son las mejores historias. Las que no encuentras en los libros de texto, sino viviendo y explorando.

Resumen Rápido

• Tunja, fundada en 1539, es una de las ciudades más antiguas de Colombia.
• El Convento de San Agustín tiene una biblioteca histórica impresionante.
• Santo Domingo es famoso por sus misteriosas pinturas murales.
• El Convento de Santa Clara la Real se dice tiene tesoros escondidos.
• San Francisco alberga rumores de manuscritos prohibidos.
• Estos conventos te transportan al pasado con historias y misterios únicos.